martes, 29 de septiembre de 2009

Lo pequeño y lo grande

Estaba leyendo un ensayo de Fernando Valls sobre el microrrelato ("Soplando vidrio"), cuando me detuvo una efervescente idea en la cabeza. Me encanta el ensayo, pero me cuesta mucho leerlo, porque me bastan dos o tres buenas páginas de pensamiento para ponerme nervioso, empezar a sentir que me asaltan mil ideas a la vez y no poder estarme quieto de pura excitación, como si en mi tejido neuronal hubiera estallado la guerra civil. Nunca consigo acabarlos, porque es como si tuviera que comer sobres de "peta-zeta" por kilos; puedo pasarme años dándole vueltas a una misma idea o a un mismo fragmento, a una paradoja o a una pregunta sin respuesta. Sólo leyendo los preambulos puramente informativos (y justificativos de subvenciones recibidas) de los másteres de lingüística de la UNED me quedé desvelado hasta las cinco de la madrugada. Pero no pretendía hablar de (otra de) mis patologías mentales, sino transmitir una idea que me asaltó al hilo de la lectura de este ensayo.

Valls (de Viena) defiende que el microrrelato no es una modalidad del género cuento, sino un género en sí mismo. Esta idea no os es desconocida. Yo siempre me he resisitido a aceptarla, creo que el microrrelato es una ínsula del genero narrativo breve. Pensé en los argumentos expuestos e intenté una reducción al absurdo que me llevó en una dirección opuesta a la esperada. Lo que diferencia al microrrelato del relato es su extrema brevedad, ergo, si esto es un elemento sustancial, ¿podríamos hablar de micropoema, microensayo y microteatro como géneros autónomos?

Luego pensé que la única razón por la que no podríamos hablar de ello es porque no se ha intentado aún, no porque sea necesariamente imposible, sino circunstancialmente, es decir, podría producirse, pero aún no se ha producido. Estas hipotéticas creaciones resituarían muchos géneros menores heredados tradicionalmente, como sucede con el microrrelato, lo cual, sería fascinante. ¡Toda una gama literaria basada en el tamaño! Como las réplicas de los coleccionables de cada otoño. Podría constituirse en eje categorial, como el verso y la prosa o la representación y la declamación aristotélica.

Propongo que podríamos empezar con el microensayo, una argumentación hiperbreve y con voluntad de estilo y agudeza intelectual.

Lanzo el guante, colegas, quien quiera que lo recoja.

Si no os apetece reconducir el rumbo de la Historia de la Literatura Universal, os propongo que, al menos, concertemos esa cena para celebrar nuestro decenio en común.

Lots of Love.

miércoles, 23 de septiembre de 2009

No es una marca de televisores alemana

Una de las muchas obras artísticas que inspiró nuestro Don Quijote fue esta suite orquestal de Telemann (no, la marca barata de imagen y sonido del Pryca era Kneissel) . La música de Telemann, si bien no tan brillante como la de sus coetáneos Bach o Haendel, está llena de energía y creatividad. Os invito a descubrirla, a aquellos que no la conozcan.

Asamblea de vecinos

Me gustaría pedir al administrador del edificio que colocara en "Flujos y reflujo" este enlace: http://altrasluz1.blogspot.com/. Se trata del Blog de Abel Murcia, poeta, director del Cervantes de Cracovia y Varsovia y un excelente traductor de poesía polaca.

jueves, 17 de septiembre de 2009

All is full of love

Has de ir por donde no sabes...

you'll be given love
you'll be taken care of
you'll be given love
you have to trust it

maybe not from the sources
you have poured yours
maybe not from the directions
you are staring at

trust your head around
it's all around you
all is full of love
all around you
all is full of love

you just aint receiving
all is full of love
your phone is off the hook
all is full of love
your doors are all shut

all is full of love!

all is full of love
all is full of love
all is full of love
all is full of love
all is full of love

Björk

lunes, 14 de septiembre de 2009

Semilla alejandrina

¿Semillas que cambien nuestro mundo? Recuerdo un cuento escrito en alemán por la narradora finlandesa Marjaleena Lembcke llamado "Cuando las piedras eran pájaros" (Als die Steine noch Vögel waren), que hablaba de un muchacho que amaba a todo el mundo. El nombre me pareció tan sugerente que escribí un relato sobre un niño fantasmal que acudía en auxilio de otro y, como prueba de su carácter sobrenatural, transformaba en pájaro una piedra arrojada por éste a un estanque. Creo que lo titulé "Oskari".

Pensar que las piedras fueron pájaros supone un ejercicio de melancolía insoportable, pero en aquella novela el protagonista sostenía que aquella condena pétrea de las aves era transitoria. Las rocas tomarán color y alas y levantarán el vuelo, en bandada y sin previo aviso, como Nils Holgerson sujeto al cuello de su ganso. Oscuridad entre dos relámpagos perpetuos, fe en la luz.

Volver en pájaros las piedras implica obtener la vida alejándose de la tierra. La vida sería una propiedad del elemento aire. Ganar la vida implicaría ascender, vivir trazaría líneas verticales con respecto a la superficie de la tierra, vivir sería volar.

¿Qué germinará de una semilla que convierte las piedras en pájaros? Árboles aéreos.

¿Hará esto de este mundo un mundo mejor? Quizá hará otro mundo mejor.

domingo, 13 de septiembre de 2009

Semilla en la tierra

A propósito de los místicos, la música y las semillas...

Y cada uno en su camino
va cantando espantando sus penas
Y cada cual en su destino
va llenando de soles sus venas
Y yo aquí sigo en mi trinchera, corazón,
tirando piedras
contra la última frontera
(...)

Carlos Chaouen

domingo, 6 de septiembre de 2009

Fray Luis de León

Oda a Salinas
El aire se serena
y viste de hermosura y luz no usada,
Salinas, cuando suena
la música estremada,
por vuestra sabia mano gobernada.
A cuyo son divino
el alma, que en olvido está sumida,
torna a cobrar el tino
y memoria perdida
de su origen primera esclarecida.
Y como se conoce,
en suerte y pensamientos se mejora;
el oro desconoce,
que el vulgo vil adora,
la belleza caduca, engañadora.
Traspasa el aire todo
hasta llegar a la más alta esfera,
y oye allí otro modo
de no perecedera música,
que es la fuente y la primera.
(...)